el porno ha muerto, viva el porno


Este año no quiero entregar el afamado premio cordltx a la performer del año. Este año se retiró Belladonna del porno y Sasha Grey, su alumna más aventajada (pero guardemos las proporciones, por favor) al parecer también. El resto del porno mainstream me parece obscenamente straight, obstinado en guardar unas formas totalmente arbitrarias de interacción que cada día se ven más añejas. Pidamos un porno chamánico, como dice Florian Cramer. No sólo pido olvidar estas distinciones de género que tanto han hecho progresar ciertos sistemas económicos sino de especies y esa fea cosa que es el apartheid de lo no orgánico. Si vamos a tener porno, que tenga algún interés.
De lo que vi este año, me quedo con Bobbi Starr interactuando muy muy feliz con una máquina, pero no sé de qué año era (bobbi starr + fucking machines). Notable. Vi la famosa doble penetración de Stoya que tanto esperamos y digamos que me quedo con el libro: qué manera de desperdiciar carne tan blanca (stoya + james deen + un pelmazo). Lo que no he visto pero querría es la fiesta de cumpleaños de Jiz Lee (que si puedo publicar mi wish list como una estrella del porno en twitter, pediría una suscripción a Crash Pad Series), que festejó con una orgía que no contemplaba barreras entre lo humano. Pero lo humano está sobrevalorado, créanme.

La imagen es de Dan Witz